Reseña #112 El gato con botas.- Charles Perrault

Titulo: El gato con botas

Autor: Charles Perrault
Páginas: 20

El reparto de la herencia de un sencillo molinero no dejó a su hijo Benjamín más que el gato del granero. Decepcionado, el hijo consideró comérselo para no morir de hambre, pero el gato resultó estar lleno de recursos, y le dijo: «No debéis afligiros, mi señor, no tenéis más que proporcionarme una bolsa y un par de botas para andar por entre los matorrales, y veréis que vuestra herencia no es tan pobre como pensáis».

Valiéndose de trucos y engaños el gato logra posicionar a su amo en una privilegiada situación, comprometiéndose con la hija de un rey y disfrutando de una vasta fortuna.

Esta va a ser una reseña muy cortita porque es un cuento infantil de muy poquitas paginas y en poco puedo opinar de el a la perfección. Empezando porque aunque tenga poquitas páginas si que te deja algo bueno y que te sirve para aprender.

Cuando el molinero murió, repartió sus bienes entre sus tres hijos. Al mayor le dio un molino, al mediano un asno, y al pequeño un gato. Imagino que lo repartió así porque pensaba que cada cosa valía menos que la anterior. El hijo pequeño, pensó que mientras sus hermanos podían juntarse y poder vivir, el tan solo podía comerse al gato, y eso le molestó y se resigno. Y cuando el gato le pide unas botas y una bolsa, el no tiene esperanzas de que suceda algo.

Conforme avanzas en el cuento vas descubriendo cual es la moraleja, y a pesar de que esta te la dicen en la última página, para mi es algo relacionado pero diferente. Algo más allá de las herencias. SPOILER DE LA MORALEJA Para mi se refiere a que lo importante no es lo que tenemos sino lo que sabemos hacer, la maña y habilidades son más importantes que los bienes, como en este caso un molino o un asno. FIN SPOILER.

No tardarás en leerlo ni diez minutos pero lo disfrutaras y aprenderás con él. A pesar de ser infantil y corto, yo pienso que todo el mundo debería leerlo y así que la moraleja que tiene les quedara clara, y no les dieran tanta importancia a las cosas.